Con más inflación esperada para los próximos meses, el mercado descuenta que seguirá anotando subas hasta al menos febrero, en particular por los efectos superpuestos de la mayor demanda en diciembre y del descongelamiento de tarifas que va a entrar a regir a partir de enero, de costos bancarios y de bienes estacionales asociados a las vacaciones de verano.
En el mes de octubre, los capítulos que más subas generaron fueron Prendas de vestir y Calzado -que trepó 6,2%- y Alimento y Bebidas no alcohólicas -con una suba del 4,8%-. Este último es el de mayor incidencia en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) con un impacto más o menos parejo en todo el país, a excepción de la región Noroeste donde subió 5,5%.
Como consecuencia, el IPC subió allí 4,1% seguido de la región Pampeana donde trepó 4%. En Cuyo y el Noreste los precios subieron 3,7%; en el Gran Buenos Aires, 3,6% y en la Patagonia anotaron una suba del 3,5%.
También impactó la suba de los combustibles en promedio del 3,5% que dejó al Transporte en el cuarto lugar de los capítulos con más aumentos (4,2%) detrás del 4,5% de Equipamiento y Mantenimiento del Hogar.
Cabe recordar que, con los programas de precios y los atrasos tarifarios en varios servicios como la telefonía celular, los precios regulados vienen subiendo por debajo de la inflación núcleo. Este mes, los regulados subieron 1,5% y los estacionales dieron un fuerte salto del 9,5%. En tanto que la inflación núcleo, que es la que marca la tendencia, marcó 3,5%.
De hecho, el conjunto de los precios regulados subió solo 10,5% en lo que va del año, frente al 27,9% de la canasta núcleo, señal de que hay inflación reprimida y que, con el descongelamiento tarifario, el IPC va a acelerarse.
Así y todo, desde el Gobierno destacaron que, pese a la aceleración de octubre, la inflación de 2020 va a cerrar prácticamente veinte puntos por debajo de la del año pasado. En efecto, para igual mes del año pasado, la inflación interanual marcaba 50,5%, 22,3 puntos porcentuales más que el 37,2% publicado este jueves.
