Me presenté al llamado en primera instancia el pasado 7 de
mayo en la materia Práctica Integral de Televisión II, contando con la
experiencia y el trabajo realizado durante el primer año en el que fui
profesora de la materia Práctica Integral de TV I.
Presenté mi proyecto y antecedentes en tiempo y forma; para
las entrevistas de defensa de proyecto se convocó a un conocido locutor del
medio Ernesto Comotti, a un docente del instituto también licenciado en
Comunicación Rafael Albarracín Franzone y en representación de la Dirección de
Nivel una Licenciada en Comunicación Social. Fuimos dos las docentes que
concursamos por este espacio curricular, siendo la segunda Valeria Olartes,
profesora de Tecnología.
El resultado de las entrevistas y defensa del proyecto fue
un empate, ya que el tribunal no se puso de acuerdo y se labró en acta que se comprometían a volver a conformar el
mismo tribunal la semana posterior a dicha instancia, para definir el
resultado, instancia en la que debíamos presentarnos nuevamente a una
entrevista y una clase pública.
Esto no se cumplió puesto que pasaron varias semanas y no se
nos convocaba, en el ínterin de ese tiempo advierto que la otra postulante en
forma ilegal me había plagiado y/o reproducido para el presente Ciclo Académico
2015 el Proyecto de la Práctica Integral de TV I 2014, presentado por mi
persona y trabajado en dicho Ciclo Académico.
Por este comportamiento antiético, inmoral y tramposo es que
he decidido presentar una nota legal y las pruebas pertinentes ante la Rectora
Prof. Stella Maris Cisneros solicitándole que no le permita seguir en el
concurso a la otra profesora por considerar "grave” el delito de plagio.
La Rectora de la Institución no sólo no le dio curso a la
nota presentada, sino que también permitió a la otra postulante presentarse en
la segunda instancia que, contó con la conformación de un nuevo jurado, esta
vez integrado por un Prof. de Lengua y Literatura, perteneciente a la
institución; una Técnica en Periodismo y una representante de la Dirección de
Nivel Superior de la provincia, por lo tanto no se respetó lo dispuesto en acta
por el Tribunal anterior a quienes tampoco se les brindó una explicación del
por qué no se los volvía a convocar.
El desempate terminó con los resultados a favor de la otra
postulante, repito Profesora en Tecnología, a pesar de haber sido denunciada
por plagio ante la Rectora de la Institución y el Tribunal actuante en ese
momento.
Hago público que como docente me siento manoseada por quién
en este momento se desempeña al frente de una institución tan importante como
lo es el Instituto de Estudios Superiores Santa María y por el segundo Tribunal
que nos evaluó, ya que presentando pruebas de la falta de ética de la otra
postulante, lo mismo se le otorgaron las horas en concurso, con las
consecuencias que eso pueda provocar en los alumnos que cursan el segundo año
de la carrera, ya que la mencionada presentó un proyecto con contenidos que ya
fueron dados el año pasado.
Como profesional, periodista y como comunicadora social, me
siento con la obligación de denunciar públicamente esta situación porque
considero que se está jugando con la formación de aquellos que confían en una
institución de gran prestigio en nuestra comunidad.