El jefe comunal rodeino se las tuvo que "bancar” solito cuando fue desairado ostensiblemente por los familiares de las víctimas de la catástrofe, en su intento por saludarlos cuando se aproximaban al puente del Mástil, donde el viernes se vivió el tocante momento de homenajear a los fallecidos y a la aún desaparaecida María Carolina Sal, arrojándose flores al cauce del río Ambato.
"No sé cómo tiene cara para venir a saludarnos, si ni siquiera tendría que haber estado en este acto”, se quejaba ante los periodistas Agustín Sal, padre de María Carolina, recordando que Casas Doering "tuvo un proceder bochornoso y nunca estuvo a la altura de las circunstancias” en la asistencia a los damnificados del fatal acontecimiento.
Después en la Iglesia de Nuestra Señora de La Candelaria, Sal fue crítico de su gestión, como la de todo el gobierno del FCyS en la anterior administración provincial, apuntando que "se construyeron puentes innecesarios, mal diseñados, sin estudios de impacto ambiental”, recalcando que "la tragedia ocurrió por las omisiones de los funcionarios responsables de esas tareas”, que eran los que conducía -como gobernador- el Ing. Brizuela del Moral.
Es más, esta es la línea argumental de la causa judicial, que, como querellante particularmente damnificado, llevan adelante Sal como otros damnificados por el aluvión.
Durante la marcha había numerosos y conocidos afiliados a la UCR o adherentes al FCyS, muchos de ellos habituales veraneantes de El Rodeo, pero ninguno se acercó para solidarizarse con Casas Doering, tras el enojoso reproche de los familiares de las víctimas. En silencio, el jefe comunal optó por seguir caminando y encontrar a algún vecino que le "de charla” para intentar disimular el mal momento.
Aunque, claro, que no aparecieron el ex gobernador y actual diputado nacional Eduardo Brizuela del Moral, como tampoco el senador nacional Oscar Castillo, sus colegas Amado David Quintar (de Fiamablá, actual presidente de la UCR), Humberto Valdez (de Fray Mamerto Esquiú) y Jorge Coronel (Tapso), ni la diputada nacional Myriam Juárez, como se exhibían orgullosamente en una ya antigua foto de campaña, observando –precisamente- los planos del puente del Mástil, que habían mandado a construir, hoy señalado como uno de los causantes del desastre de un año atrás.