Es la segunda edición de esta peregrinación parroquial que
anima a todas las parroquias de la diócesis a llegar como comunidad a los pies
de la Virgen.
Alrededor de las 9.00, una gran cantidad de fieles arribó en
colectivos al Parque de los Niños, desde donde continuaron la peregrinación a
pie, rezando, cantando y llenando las calles de la ciudad con sus estandartes,
banderas con los colores patrios, distintivo elegido en el Año del Bicentenario
de la Independencia. También acompañaron la peregrinación varios sacerdotes del
clero local dispensando el sacramento de la Reconciliación.
Al llegar al Paseo de la Fe, fueron recibidos por el Rector
del Santuario Mariano, Pbro. José Antonio Díaz, quien agradeció su testimonio
de amor a la Morena Virgen del Valle y los felicitó por la iniciativa. En el
Año de la Misericordia, hizo referencia a las indulgencias plenarias que
alcanzan quienes en este año peregrinan a los santuarios y atraviesan la Puerta
Santa.
A continuación se vivió un emotivo homenaje a la Madre del
Valle, en el que representantes de las comunidades expresaron su devoción con
palabras alusivas, poemas y canciones en el Paseo de la Fe.
A las 11.00, en una gran columna hicieron ingreso por la
Puerta Santa y participaron de la Santa Misa, presidida por el Obispo
Diocesano, Mons. Luis Urbanc, y concelebrada por sacerdotes del clero local.
El Pastor Diocesano comenzó su homilía destacando: "Es para
mí un motivo de particular gozo encontrarme con ustedes en este Santuario y
celebrar la Eucaristía en honor a Nuestra Madre. Los felicito, es el segundo
año que peregrinan, y les pido a los sacerdotes que todas las parroquias puedan
peregrinar como una sola Iglesia particular bajo la protección de la Virgen.
Los felicito por este ejemplo de amor a la Virgen y por venir como comunidad en
este día”.
También resaltó que "lo más lindo que me han traído son los
niños, ellos perciben profundamente el misterio del amor de Cristo.
Felicitaciones a toda la comunidad de Paclín y espero que bajo la advocación de
la Virgen del Rosario sigan acrecentando la vocación misionera”.
Para finalizar, el Obispo los invitó a que "perseveren
firmemente en esta peregrinación y recen por las demás comunidades para que lo
puedan realizar”.
En el momento de las ofrendas, acercaron a altar azúcar y
yerba que, en un gesto de misericordia, fue destinada a los hermanos que están
privados de la libertad y entregada al Pbro. Dardo Olivera, responsable de la
Pastoral Penitenciaria.
Los peregrinos cerraron esta jornada con cantos, aplausos y
con la alegría de esta con la Madre que los protege.