Fuentes del Ministerio de Cultura y Turismo de Salta informaron hoy que el convoy, que funciona ahora bajo la denominación Sociedad del Estado Tren a las Nubes, saldrá el sábado con un coche comedor, un coche bar, un furgón con sala de primeros auxilios y dos coches con 170 pasajeros.
El valor del pasaje, que incluye ida en tren con regreso por carretera, será de 1.540 pesos, aunque se dispondrá una tarifa promocional para residentes argentinos de 1.100 pesos y otra para residentes salteños de 350 pesos.
También habrá otra tarifa para aquellos que compren sólo la ida en tren hacia San Antonio de lo Cobres, quienes además tendrán la opción de contratar a las agencias de viajes distintas excursiones para combinar con circuitos turísticos de la zona.
"Luego de la decisión de nuestro gobernador, Juan Manuel Urtubey, de tomar la concesión del Tren a las Nubes en manos del Estado, es un orgullo para todos los salteños por poder ser parte de este ícono tan importante no sólo a nivel nacional sino también internacional”, dijo el presidente de la Sociedad del Estado, Diego Valdecantos.
La semana pasada se inauguró una nueva oficina comercial, ubicada en Alberdi 53 local 33, en la capital salteña, donde se encuentra disponible la compra de pasajes, que además se pueden adquirir a través de las agencias de viajes locales y nacionales, como así también en Casa de Salta en Buenos Aires.
Los arreglos y refacciones que se ejecutaron en los coches de pasajeros se realizaron en conjunto con el ferrocarrial Belgrano Cargas en los talleres ferroviarios de la localidad de General Güemes, mientras que la remodelación y la renovación de los interiores de los coches estuvieron a cargo de la provincia.
Las locomotoras fueron refaccionadas en los talleres de Alta Córdoba, mientras que en el Ramal C 14 se realizaron diversas tareas de mantenimiento de manera conjunta entre la provincia y la Nación, para garantizar un óptimo estado de las vías.
El gobierno de Salta decidió, el 22 de julio pasado, hacerse cargo de la concesión de ese servicio turístico, que estaba en manos de la firma Ecotren SA, luego de recibir informes técnicos que indicaban que tras un descarrilamiento ocurrido días antes, el convoy estaba imposibilitado de salir por cuestiones de seguridad.