Este anuncio lo realizó ayer al formular un balance del
traspaso judicial del RENATEA (Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores
Agrarios) al histórico Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores
(RENATRE), dispuesto meses atrás por un fallo judicial de la Corte Suprema.
"Nosotros nos fuimos por la puerta de adelante y
volvimos por la misma puerta. Ellos entraron por la ventana y se fueron por la
ventana", resumió Venegas, al referirse al desalojo con fuerzas de la
Gendarmería de trabajadores y responsables del RENATRE el 23 de enero de 2012, que marcó el inició de la gestión kirchnerista
del RENATEA por casi cuatro años.
Venegas aludió a los trabajadores rurales de toda la
Argentina, y remarcó que su gremio, la UATRE, "nos devolvió el RENATRE la Justicia,
y no el gobierno que asumió con el presidente Macri. Pero confiamos en este
gobierno-agregó-que no le roba a los argentinos, como el que teníamos antes- en
alusión al gobierno kirchnerista-que gobernaba con gobernantes corruptos y
trabajadores pobres".
En representación del directorio del RENATRE a constituirse
en los próximos días con 8 directores, cuatro por la entidad gremial más
representativa del sector, la UATRE, y cuatro por las entidades rurales
empleadoras, Sociedad Rural Argentina, Confederación Intercooperativa
agropecuaria (CONINAGRO), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Federación Agraria
Argentina (FAA), Venegas aseguró que "no estamos despidiendo gente, sino
que hemos hecho un acuerdo con UPCN, el gremio que representa los trabajadores
del RENATEA en extinción, a partir de la decisión que ordenó la justicia de que
volvamos al estado anterior cuando existía el RENATRE, y los trabajadores que
se van lo hacen con una triple indemnización".
En un extenso balance de la gestión kirchnerista del
RENATEA, Venegas puntualizó que "hubo desvío y malversación de fondos, y
los responsables van a ir presos, y el máximo responsable fue el anterior ministro de Trabajo, Carlos
Tomada".
Entre otros datos de lo realizado por las autoridades del
RENATEA, detalló que "no hubo balances ni auditoría, ni controles internos
ni externos de esa gestión en sus cuatro años de existencia", se triplicó
el personal, y pagaron salarios de hasta 63.000 pesos mensuales, se destruyó la
historia laboral digitalizada del Registro, se deterioró el padrón nacional de
los trabajadores rurales, agregándose trabajadores de otras actividades, se
pagaron a organizaciones civiles, ONGS y municipalidades de todo el país más de
65 millones en programas sociales, de los cuales solo se justificaron
legalmente 5 millones, y hubo una "manifiesta utilización política de los
aportes genuinos de los trabajadores rurales".
Al respecto la doctora Erica Utrera, gerenta legal del
RENATEA, remarcó que durante el año 2015 se pagaron 298 millones en salarios al
personal, mientras que por prestaciones por seguro de desempleo solo se
liquidaron 71 millones a los trabajadores rurales.