La discusión por la reforma impositiva integral y por un
nuevo esquema de coparticipación podría derivar en un cambio en la distribución
de subsidios que favorezca más a las provincias. Del total de recursos
destinados a energía y transporte, alrededor de 270.000 millones de pesos en
2016, la mitad benefició a los bonaerenses y los porteños.
La decisión de incluir el tema en el debate global ya está
tomada. Según pudo saber LA NACION, se resolvió hace unos días en reuniones
mantenidas en Hacienda. Allí se ratificó que la mirada debe ser global respecto
de los recursos que la Nación transfiere a las provincias porque, de otra
manera, podrían mantenerse o generarse nuevos desequilibrios en el reparto.
"No habrá un aumento de la masa de subsidios, por el
contrario, se reducirá. Pero hay que rediscutir el reparto", insistió ante
LA NACION un funcionario de la Casa Rosada. El presupuesto aprobado para este
año prevé un recorte de los correspondientes a energía del 22,9%.
El tema de los subsidios ya fue planteado el año pasado,
cuando se abordó la búsqueda de una solución para el tope de 650 millones de
pesos del Fondo del Conurbano. El ministro de Finanzas de Córdoba, Osvaldo
Giordano, admite que ese techo es ilógico, pero también apuntó que la provincia
recibe dinero extra respecto al resto vía subsidios.
La agenda de la reforma tributaria prometida para este año
por el presidente Mauricio Macri comenzará a tomar forma el próximo 2 de
febrero, para cuando están convocados por el Ministerio del Interior los
gobernadores.
Ese día difícilmente haya un borrador de proyecto; el
objetivo es describir el planteo general: reducir la presión tributaria récord
del 34% del PBI, incluyendo las tasas municipales para que el sector privado
gane competitividad.
Seguramente se dedicará un tiempo a tratar de reducir la
tensión que implicó con varios gobernadores el traspaso de 25.000 millones de
pesos a Buenos Aires.
Si bien ya se venía trabajando en general sobre
modificaciones tributarias con los gobernadores en la gestión del ex ministro
Alfonso Prat-Gay, ahora la orden del presidente Mauricio Macri es acelerar los
tiempos. En su contacto con el gobernador cordobés, Juan Schiaretti, aprovechó
para insistirle en que "debe salir este año".
El economista Nadín Argañaraz, uno de los mayores
especialistas en tributos provinciales y municipales, fue ratificado como
subsecretario de Desarrollo en Hacienda y es uno de los encargados de seguir
colaborando -como lo venía haciendo- en el diseño del nuevo esquema.
De las conversaciones mantenidas en estas semanas se infiere
que Hacienda tendrá más participación en la forma en que se reparten los
subsidios; no porque vaya a gestionar las partidas concentradas en los
ministerios de Energía y Transporte, sino porque requerirá más información de
esas áreas para fundamentar sugerencias.