Sin respiro: el calor agobia a la mitad de la Argentina

Ni la ropa blanca, ni los abanicos ni los ventiladores personales que se vendían sin parar en el Barrio Chino, ni siquiera los litros de agua podían sofocar ayer el calor agobiante que castigaba a los peatones en las calles porteñas y en las de la mitad del país.

Una masa de aire cálido y húmedo está instalada desde el norte de la Patagonia hasta el extremo norte de la Argentina y se quedará hasta la semana que viene. ¿Las consecuencias? Elevada sensación térmica y tormentas aisladas, según informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).

Según el organismo, el fenómeno, que provocó que se emitiera una alerta amarilla en la ciudad, se produjo porque vientos del sector norte desplazaron hacia el centro una masa de aire cálido y húmedo que bajó desde Paraguay y Formosa. Indican que no es un evento que obedezca al cambio climático.

"Se trata de un fenómeno que ocurre dos o tres veces durante los veranos, pero se prolonga dos días. Ahora ya vamos por el cuarto. Por eso parece que hiciera más calor", señaló Ignacio López Amorín, meteorólogo del SMN.

Si bien las temperaturas están cinco grados por encima de la máxima promedio para este mes (26°C), están lejos del récord de 1944, cuando el termómetro trepó a los 38°C en la ciudad.

Tampoco hubo registros extremos de temperaturas ni de agua caída a causa de las tormentas aisladas.

La sensación térmica fue muy alta en varias localidades ayer. Por ejemplo, en Villa Reynolds, en San Luis, se sintió el calor como si hicieran 44°2 C; en Marcos Juárez, Córdoba, 42°9 C; en Sáenz Peña, Chaco, 42°2 C, y en Moreno, en Buenos Aires, 43°5 C. La sensación térmica surge de un cálculo que se hace cuando las temperaturas superan los 26°C y la humedad alcanza el 40 por ciento. "Se toma a una persona promedio, que pesa entre 70 y 75 kilos. Estar por encima de ese peso supone sufrir mucho más el calor", indicó Amorín.

En la ciudad, el valor más alto de la térmica se registró al mediodía de ayer, con 40°C. El pronóstico indica que se mantendrán las condiciones durante el fin de semana con registros que llegarán a los 31 grados.

La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) confirmó que a las 15.15 se rompió el récord de consumo de electricidad, con 25.595 megawatts (ver aparte). Así se superó la cifra anterior, del 12 de febrero de 2016 (25.380 MW).

Frente a este escenario, el Ministerio de Salud de la Nación volvió a recordar ayer las medidas para hidratarse: "Cuando se habla de golpe de calor se refiere a un aumento de la temperatura corporal por una exposición prolongada al sol. El cuerpo termina perdiendo agua y sales esenciales para su buen funcionamiento y así tiene dificultades para regular la temperatura mediante sus mecanismos habituales. El más mínimo síntoma fuera de lo normal puede funcionar como un llamado de atención para la salud".

Desde la cartera recordaron que ante la aparición de fiebre, sequedad en la boca, vómitos o desmayos debe consultarse a un médico. Para prevenirlo hay que evitar la actividad física intensa y las bebidas con cafeína o azúcar en exceso y con alcohol.

Para las localidades de Gualeguaychú y Corrientes, capitales del Carnaval en el litoral, se esperan buenas condiciones de tiempo para todo el fin de semana largo, con mucho calor y humedad y temperaturas máximas que oscilarán entre los 30 y los 33 grados. El martes hay un mayor riesgo de tormentas.

En la costa, continuará el calor, con máximas de entre 30°C y 31°C. Sin embargo, se esperan lluvias y tormentas, por períodos, para los cuatro días. Según el pronóstico extendido del SMN, hay un frente frío estacionado en el sur de la provincia.

Respecto de las tormentas pronosticadas, seguirán siendo aisladas: "La intensidad no tiene nada que ver con la extensión que cubran. Se producen dentro de la masa de aire muy húmeda y como hay tanto vapor de agua disponible puede precipitar mucho y en un muy breve período de tiempo. Por ahora, tampoco se batió ningún récord", sostuvo Amorín. La Nación.