Quince días
después del primer paro general que sufrió el gobierno de Mauricio Macri, la
CGT endureció su postura, se quejó por la falta de respuestas y adelantó que la
tensión entre ambas partes va a aumentar si no hay señales claras.
El
integrante del triunvirato de la central obrera, Juan Carlos Schmid, afirmó hoy
que tras la medida de fuerza del pasado 6 de abril "no se han visto
señales del Gobierno" hacia los trabajadores, por lo que consideró que se
debe "ir madurando el conflicto".
"Los
paros no son mágicos. Puede tener resultados en meses y al año. Esta es la
historia de la lucha por el progreso social", expresó el dirigente gremial
y sostuvo por el momento no se han "visto señales del Gobierno" para
atender los reclamos de la CGT. Al respecto, evaluó: "Obviamente vemos que
tenemos que ir madurando el conflicto".