Ambos, momentos antes, habrían sido sorprendidos en el
interior de un automóvil que estaba estacionado frente al domicilio de su
propietario, un hombre de apellido Barros (53), quien dio aviso a los
uniformados que rápidamente llegaron al lugar y, tras una breve persecución,
lograron interceptar a los jovencitos en un sitio baldío.
Tras la requisa correspondiente, a uno de ellos le
encontraron una bolsa que contenía en su interior un matafuego, un estéreo, el
frente de otro estéreo, un gorro de lana, un par de anteojos de sol, dos
pelotas de tenis, un cable USB y otros elementos, que serían producto de
distintos ilícitos en la zona, por lo que fueron puestos a disposición de