Según los resultados de investigaciones, la víctima había
recibido el dinero por el rescate pero no entregó el rodado y esto provocó la
furia de los hermanos prófugos, quienes también se dedican al robo de motos.
Cabe remarcar que la moto Honda 150 cc que había sido
abandonada en la esquina de Maipú y Chacabuco, está a nombre de una mujer,
hermana de los sospechosos prófugos.
El rodado había sido robado semanas atrás a la joven, quien oportunamente
no realizó la correspondiente denuncia.
El episodio se habría comenzado a tejer cuando desde el
bando contrario de Apaza, es decir, la familia de la mujer a la que le robaron
la moto, le ofrecieron a la víctima la entrega del dinero para rescatar el vehículo.
Así el dinero del rescate terminó en manos de Apaza, quien se
resistió a la entrega de la moto a pesar que ya había recibido algunos aprietes
por parte de la familia de la damnificada.
Ante esta situación, los integrantes de la familia del bando
contrario a Apaza habrían decidido atacarlo cuando salía de la pollería de su
propiedad, ubicada en el norte de la ciudad, en la madrugada del miércoles 7 de
octubre.
Allí fue donde recibió cuatro disparos en su cuerpo mientras
se conducía en su auto Fiat Palio, en el que también se encontraron 15 mil
pesos.
El único detenido es Ever Santos, quien es acusado de ser el entregador y partícipe necesario en el crimen, mientras que hay dos prófugos de apellido Gordillo.