Tras meses de investigación, la Policía detuvo en Catamarca
a un joven de 33 años acusado de haber filmado los ataques sexuales contra
varios niños. Ahora tratan de establecer si no es miembro de alguna red de
pedofilia que intercambiaba las imágenes que producía.
La pesquisa se inició de una forma insólita. Un taxista se
presentó en una comisaría para denunciar que un pasajero que había levantado en
el centro de la ciudad de Tucumán olvidó su celular en su vehículo. A los pocos
días, el chofer descubrió varios videos donde aparecía el joven abusando de
varios niños. Según afirmó, las imágenes eran tan fuertes que decidió denunciar
el caso.
Además, el chofer sostuvo que él "estaba seguro"
que el hombre que aparecía en las imágenes era el pasajero, ya que ocupó el
asiento del acompañante y confesó además que una filmación era tan aberrante
que decidió borrarla.
Por pedido de la fiscal del caso, personal de Seguridad
Personal se hizo cargo de la investigación, según publica el diario La Gaceta.
Luego de analizar el teléfono móvil, lograron recuperar datos de la víctima y
del victimario. En medio de decenas de fotografías, los investigadores
encontraron imágenes del sospechoso en su ámbito laboral, una fábrica de hielo
en donde les brindaron la identidad, algunos datos personales y la confirmación
de que allí no trabajaba más desde hace tiempo.
Los policías lograron ubicar el domicilio del supuesto
abusador. Se entrevistaron con una joven que les dijo que la persona que
buscaban era su ex pareja y que por razones laborales había decidido regresar a
Catamarca, su provincia natal. Una comisión viajó a Catamarca con la orden de
detener al sospechoso y con la colaboración de policías de esa provincia,
arrestaron al abusador cuando intentaba llegar al domicilio paterno.
A continuación, allanaron la vivienda y consiguieron datos
claves: determinaron que el menor abusado era un allegado a la familia y
establecieron el lugar donde supuestamente se concretó el abuso. El abusador,
según la teoría de los pesquisas, concretaba los ataques en las visitas que
realizaba a la familia política y aprovechando la ausencia de los mayores de la
casa.
Personal de la Policía Científica sacó fotos de una habitación
que terminó siendo muy parecida a la que aparece en las filmaciones. Al mismo
tiempo, secuestraron otros elementos (almohadón, acolchado y cubrecamas) que
son similares a los que se pueden descubrir en las filmaciones.
"Esto no termina acá, se debe seguir trabajando para
esclarecer otras cuestiones", aseguró Giannoni al diario tucumano. La
fiscalía no descarta que en los ataques sexuales haya participado por lo menos
una persona más que filmó los aberrantes actos. Por otra parte, quiere comprobar
si el sospechoso pertenece o no a una red de pedofilia internacional.
El detenido, según se anunció, será extraditado a Tucumán
mañana o el lunes. Continuará detenido y deberá declarar ante la fiscalía
Giannoni.