Funcionarios del gobierno y sindicalistas

Guiño oficial con una hasta ayer inédita visita al arco gremial

Si bien no trascendieron los detalles de las conversaciones, a la luz de lo poco que se conoció del cónclave, representantes del gobierno provincial y del arco sindical peronista se reunieron el viernes por la noche en la sede del Centro de Empleados de Comercio CEC), donde cenaron y habrían alcanzado un “positivo acercamiento”.
sábado, 25 de octubre de 2014 12:23
sábado, 25 de octubre de 2014 12:23

El anfitrión fue Roberto Antonio González, "dueño de casa” y líder de los "mercantiles” locales, a la vez secretario general de las "62 Organizaciones Peronistas” de Catamarca, quien sentó a su derecha al jefe de la CGT Regional, el "transportista” Pedro Armando "el Uto” Carrizo. Junto a ellos se alinearon otros cuarenta comensales, representantes de distintos sindicatos.

Los invitados fueron el ministro de Gobierno, Gustavo Saadi, el subsecretario de Municipalidades y también armador político del oficialismo Fidel "el Pocho” Sáenz, y Daniel Lavatelli conspicuo colaborador de ambos funcionarios en tareas tanto de orden institucional como partidarias.

Lo primero que trascendió fue la foto, donde al menos los protagonistas citados se ven sonrientes y animados, detalle que podría vaticinar un buen augurio sobre los resultados de la reunión. Los temas tratados y sus conclusiones se mantienen en reserva, como sigilosamente se había convenido la realización del encuentro.

De todos modos, en el campamento gremial, el mitin fue tomado como "un reconocimiento, y hasta si se quiere como una reparación después de tanto ninguneo”, como públicamente se quejaran hasta no hace mucho Carrizo y González.

Y acerca de lo temas analizados, no deben haber andado muy lejos de las propuestas e intenciones obreras para la motorizada reforma constitucional, entre cuyos principales propulsores están los funcionarios presentes en el convite.

Se sabe que desde la CGT y "las 62” se viene solicitando la creación de un Ministerio de Trabajo, para jerarquizar las funciones del control y aplicación de las normas laborales, como también la creación de un Banco de Fomento para la producción y la generación de empleo genuino con parte de los ingresos que la Provincia percibe por regalías mineras.

Tampoco habrán sido ajenas las cuestiones políticas, teniendo en cuenta que la provincia está entrando al estricto y exigente límite de un año puramente electoral, con un menú amplísimo de probables fechas y eventuales convocatorias, tanto a nivel provincial como nacional, con los condimentos todavía irresueltos de las PASO y una convención constituyente en ciernes.

La foto y algún comentario aislado trasmitieron la idea de que fue "un encuentro muy positivo”, aunque habrá que esperar las expresiones de los protagonistas (por ahora con los celulares cerrados) para traducir los verdaderos alcances de la comida, hasta ayer inédita, en el marco de las cambiantes y a veces controvertidas relaciones de los gremios con el gobierno de la provincia.