Analizando el contexto de los trabajadores, es dable
mencionar que de acuerdo a sus propios comentarios, existían serios temores de
perder su fuente laboral, pasando a integrar la masa de personas en edad
productiva que no encuentra un puesto de trabajo.
En ese sentido, estos obreros manifestaron su profundo agradecimiento
a la gobernadora Lucía Corpacci por haber acertado en su decisión de acelerar
los tiempos de las empresas, seguramente pensando en todos ellos.
Consecuentemente, la veintena de trabajadores renovaron su compromiso
para con la empresa y se lamentaron de que el gobierno de Brizuela del Moral,
autor inexcusable del enfrentamiento del 15 de febrero de 2010, no haya asumido
la responsabilidad que significa tener tanta gente desocupada, con un enorme
yacimiento en ciernes, teniendo en sus manos el poder de decisión.
Finalmente, expresaron ruidosamente su alegría y auguraron
muchos años de prosperidad para los pueblos de la región.