Luego de temperaturas que superaron ampliamente los 40°, en
la noche del lunes, se desató un breve pero nutriente y refrescante chaparrón
que no duró mucho tiempo, pero que trajo el anhelado alivio a los pobladores de
la zona, ya que el calor se hacía sentir desde hacía ya varias semanas, sin
pausa.
La mañana del martes se presentó nublada, lo que significó una agradable
temperatura ambiente y sobre todo, gente contenta y aliviada que aprovechó las
bonanzas del clima para salir a las calles en el inicio de esta temporada
estival.
Sin embargo, después del mediodía, las nubes se apartaron un
poco, la lluvia volvió a alejarse y el sol se asomó, aunque no como los días
pasados, registrándose en esta ciudad, una agradable tarde, especial para
actividades veraniegas, aunque sin el martirio del sol calcinante.
De acuerdo a los pronósticos, no se esperan lluvias en los
próximos diez días, y la gente de Vialidad Provincial sigue instando a los
viajantes, a manejar con mucha precaución, sobre todo en la Quebrada de La
Cébila, por los constantes derrumbes de la montaña.