"Bicéfalos y Acorallados” es una obra de danza que intenta
representar las prácticas agrícolas y
ritos de iniciación de un chamán en el NOA precolombino. Esta iniciación invita a un viaje de éxtasis
al vientre mismo de la Pachamama, donde el movimiento se vuelve oscuro y denso,
con la presencia de los espíritus de los antepasados y animales sagrados.
La danza de "Bicéfalos y Acorallados” nada tiene que ver con
las danzas reconocidas académicamente, aquellas herederas de la colonia europea
que destruyó, ocultó y modificó el acervo cultural de los pueblos originarios,
y con ello sus ritos y prácticas, y entre ellas las artes de hacer movimientos.
Por el contrario, en esta obra se intenta reconstruir la danza desde una
dimensión diferente.
Esta obra es producto de una beca que el grupo "Pulsiones
danza” obtuvo a través de la línea de
Proyectos Grupales del Fondo Nacional de
las Artes (FNA).
Está basada en una investigación de Gonzalo Reartes, quien
realizó un trabajo sobre discursos pos-coloniales en la danza. A partir de
allí, los integrantes del grupo, con la dirección del bailarín Víctor Aybar,
realizan esa misma investigación desde el punto de vista corporal, e intentan
desentrañar las danzas precolombinas a través de la observación de los dibujos
plasmados en cerámicas y tejidos de la cultura diaguita. De allí que la danza representada en
"Bicéfalos y Acorallados” tiene otras técnicas, con percusiones de otro tipo,
muy diferentes a lo que estamos acostumbrados a ver.
Completan el elenco de bailarines Noelia Barros, Valeria
Berrondo, Paula Novaro, Andrea Corbalán, Ariadna Leguizamón, Karin Haddad,
Virginia Coll, Luciana Nieva Bustamante y Ana Aybar.