Por el Gobierno
se hicieron presentes la vicepresidenta de la Nación Gabriela Michetti, los
ministros Sergio Bergman (Ambiente) y Pablo Avelluto (Cultura), Hernán Lombardi
(Sistema Federal de Medios Públicos) y Laura Alonso (Oficina Anticorrupción) y
el sindicalista Julio Piumato, entre otros. El presidente Mauricio Macri
anunció que no asistiría.
Los oradores del
acto, convocado bajo los lemas "Justicia por Nisman" y "Donde
hay memoria, hay justicia", fueron el fiscal Germán Moldes, el escritor
Federico Andahazi, y Luis Czyzewski, padre de Paola, víctima del atentado a la
AMIA.
Al tomar la
palabra, Moldes aseguró que Nisman "murió por denunciar a Cristina" y
agregó que "los personeros de la impunidad se cansaron de intentar impedir
el avance de la justicia".
"Nisman
murió por denunciar a Cristina de Kirchner, a (Héctor) Timerman y a los cinco
grandes del buen humor que le hacen coro", continuó
Moldes le apuntó
duramente al juez Daniel Rafecas, que desestimó la denuncia de Nisman, dijo que
"hay magistrados que no merecen seguir recibiendo el nombre de
tales", ya que "no los salpica el caso, sino que están sumergidos
hasta el cuello en la ciénaga de la vergüenza".
El fiscal de
Cámara sostuvo además que la apertura de la denuncia de Nisman es un
"bichito de ilusión", ya que Nisman "por un acto de coraje de
denunciar a los poderosos dejó la vida por el camino".
Oficio religioso
Por la mañana, familiares,
amigos y allegados de Nisman participaron de un oficio religioso en el
cementerio israelita de La Tablada en memoria del fallecido exfiscal.
La madre del ex fiscal,
Sara Garfunkel, avisó que no podía asistir a la cita, pero hizo llegar una
carta en la que agradece el homenaje a su hijo, a quien definió como "un
valiente fiscal que luchó y puso lo mejor de sí, entregando su vida misma en la
búsqueda de la verdad por el esclarecimiento de un acto de barbarie".
Nisman fue
hallado sin vida en su departamento de Puerto Madero, horas antes de que se
presentara ante la comisión de Legislación Penal del Congreso Nacional a
aclarar el contenido de su denuncia contra la expresidenta Cristina Kirchner
por un supuesto pacto de impunidad para encubrir a los sospechosos iraníes de
haber perpetrado el atentado terrorista a la sede de la AMIA ocurrido en 1994,
que dejó 85 muertos.
La denuncia de
Nisman, reabierta semanas atrás por un fallo de la Sala I de la Cámara Federal
de Casación Penal, que dejó la causa en manos del juez Ariel Lijo, involucra no
solo a la exmandataria sino también al excanciller Héctor Timerman, al diputado
camporista Andrés "Cuervo" Larroque, a los dirigentes Luis D'Elía y
Fernando Esteche, entre otros.
El único
imputado, por el momento, es el técnico informático Diego Lagomarsino, que fue
quien le entregó el arma desde la que salió el disparo fatal.
En tanto, el
presidente de la DAIA, Ariel Cohen Sabban, sostuvo este miércoles que "la
Argentina no puede dar el lujo de no resolver la muerte de Nisman" y que
"su muerte dudosa y violenta está ligada con su tarea".