"Hay muchos
muertos", declaró Antonio Crocetta, uno de los jefes de los socorristas
alpinos enviados en la madrugada al Hotel Rigopiano. "No sabemos cuántos
muertos o desaparecidos hay", señaló por su parte en su página de Facebook
Antonio Di Marco, presidente de la provincia. "Lo que es seguro es que el
edificio fue desplazado una decena de metros".
Dos personas
fueron halladas sanas y salvas, una de ellas en estado de hipotermia, según la
agencia italiana Agi. Había una treintena de personas entre clientes y personal
en el hotel, situado cerca de Farindola, en Los Abruzos, según el jefe de la
protección civil, Fabrizio Curcio.
Esta región dista
un centenar de kilómetros de la de Amatrice, sacudida ayer por una serie de
terremotos. Advierten que la avalancha pudo haber sido provocada por uno de
estos sismos que se sintieron hasta en Roma, situada a unos 180 kilómetros del
epicentro.
Imágenes de video
mostraban a rescatistas con palas cavando a través de un muro de nieve, y al
menos un hombre al que se llevaba a través del camino despejado. Una ambulancia
se quedó bloqueada a varios kilómetros del hotel.
También
circularon videos que mostraban a socorristas entrando en el hotel, donde pilas
de nieve y escombros habían caído por las escaleras hasta el vestíbulo. El alud
derribó los muros exteriores del edificio, y en la grabación se veía nieve
sucia y escombros amontonados en los pasillos del hotel.
Las condiciones
meteorológicas y la nieve, que en algunos puntos alcanza los dos metros de
espesor, dificultaron el acceso a este hotel aislado en la montaña.
Los primeros
socorristas alcanzaron el lugar esquiando y la mayoría de los equipos seguían
tratando de llegar a destino, indicó Curcio en torno a las 9 locales (8 GMT).