El siempre políticamente correcto doctor Rubén Mazi acaba de
sufrir una caída, que es política, pero que no es una derrota definitiva. Hasta
hace unas semanas era número puesto para integrar la oferta electoral de
Cambiemos – FCS para las PASO; pero sorpresivamente desapareció de la escena
pública sin que se supiera más nada de él, menos que menos el por qué.
Obvio, nadie en la oposición nadie emitió un S.O.S., pero
tampoco una explicación de por qué es dejado de lado este personaje que encarna
mejor que nadie los valores del medio pelo local.
Hubo si algunos comentarios un tanto desconsiderados sobre
Manzi de parte de dirigentes y medios radicales.
A principio de semana se le consultó a Alfredo Marchiolli si
la Coalición Cívica de Manzi integraba el frente de dirigentes del FCS que se
oponía a la candidatura de Eduardo Brizuela del Moral. "No sabemos nada”, dijo
Marchiolli, resaltando su sospechosa desaparición del espacio que reunía a los
que promueven una renovación legitima en el radicalismo, libre de Brizuela del
Moral, Castillo y otros apellidos ilustres.
En su edición de hoy, El Ancasti, claramente decidido a ser vocero del frente Cambiemos – FCS,
realiza otro comentario poco feliz para la imagen de Manzi. En un comentario de
pocas líneas, titulado "Sin datos de Manzi”, indica que "en la CC entienden que
en realidad Manzi fue medido y logró resultados que lo posicionarían para
pelearle la candidatura a diputado nacional a Eduardo Brizuela del Moral, pero
los datos fueron excluidos del informe por alguna mano traviesa de la UCR, para
allanarle la reelección del ex gobernador” (SIC). Eso y decirle que desconoce
el oficio del político es lo mismo. En las mil viviendas cualquier almacenero
diría que lo "madrugaron”.
Lo que si se sabe concretamente es que Manzi no figuró en el
listado de candidatos que Lilita Carrió le exigió al presidente Macri. Se sabe
que Lilita, para hacerse cargo de una candidatura principal en Buenos Aires
exigió que varios de sus seguidores en las provincias fueron ubicados en
lugares expectantes en las listas de candidatos de Cambiemos. Hasta donde se
sabe, a Lilita se le pagó todo; si Manzi no un lugar asegurado es porque
tampoco figuró en el listado de Lilita. Una Lastima!
Del hombre hay que decir que la juega de diferente en la
fauna radical conservadora local, pero viéndolo bien no es tanta esa
diferencia; basta decir que todos, él incluido, tienen una idea bastante
elástica de lo que es la coherencia, sobre todo cuando se trata de dar el
ejemplo en hechos concretos (por ejemplo: en la cruzada contra el nepotismo o
en la necesidad del recambio generacional, solo por citar algunos casos).
Es cierto si que carece de modos violentos o vehementes,
pero su característica política es mostrarse siempre como lo opuesto de sus adversarios
ocasionales y más aun si esos adversarios representan al peronismo; y desde ahí
rechaza toda posibilidad de
entendimiento alguno, porque dice siempre anteponer su proyecto que casi nunca
explicita. Un campeón este Manzi en esto de recurrir a coartadas ideológicas
progresistas para defender aquello que no lo es.
Ahora, como dirían en las mil viviendas, parece que los
"acostaron”, pero seguramente habrá revancha, en política siempre la hay….