El involucrado, en esta oportunidad, es Miguel Brizuela, integrante del plantel profesional de Vélez, quien fue denunciado por su pareja debido a las agresiones que recibió en la noche del sábado de parte del jugador que, afirman, estaba en estado de ebriedad.
El defensor, de 23 años y con dos encuentros oficiales en la máxima categoría, está acusado de “haber ejercido violencia física”, además de “maltrato verbal y psicológico” hacia Melina Neto. La denuncia fue radicada en una comisaría de San Martín.
A partir de esta situación, la entidad de Liniers se contactó con la víctima para brindarle su apoyo y decidió separar preventivamente al jugador. A través de un comunicado elevado a las redes sociales, el Fortín expresó: "La institución se pone a disposición de la UFIJ Nro. 23 descentralizada de Malvinas Argentinas, a los efectos que estime correspondiente. De este modo, nuestro Club refirma su compromiso como parte de la sociedad para erradicar la violencia contra las mujeres".