De este total el 75% corresponde a los ingresos generados
por el impuesto a los Ingresos Brutos (IIBB) que contribuye con un estimado de
$ 78.377 millones, registrando un incremento interanual del 37%, según un
informe de NOAnomics.
Este resultado permite vislumbrar una fuerte pérdida de
dinamismo en la recaudación de tributos de origen provincial en comparación con
el primer semestre del año pasado, para el que los ingresos propios habían
crecido al 47% interanual y marcaban una diferencia de 15 puntos porcentuales
(p.p.) respecto de la evolución de la recaudación impositiva nacional (sólo
impositiva sin considerar comercio exterior ni seguridad social). Así, la
mencionada brecha se ha reducido a tan sólo 1 punto porcentual (36% versus 35%)
y ambas trayectorias prácticamente confluyen.
La mayoría de las provincias consiguen ubicarse por encima
del promedio del 36% de incremento del consolidado de 17 provincias,
destacándose Neuquén con una mejora de ingresos tributarios propios del 61%,
siguiendo Entre Ríos y Tierra del Fuego con aumentos del 59% y 51%
respectivamente. Catamarca (48%). Río Negro (43%) y Mendoza (43%) completan la
nómina de las seis provincias que logran superar la inflación del período y por
ende aumentan el poder adquisitivo de sus recaudaciones. En todas ellas todavía
operan cambios de los códigos fiscales (más carga tributaria) en la comparación
interanual.
Las 11 restantes fracasan en la carrera de ganarle a la tasa
de inflación acumulada del período (42,3%), recordando que en el mismo semestre
de 2013 solamente Catamarca no lo hacía, estando prácticamente en el límite
Formosa (42,2%) y cerca Jujuy y San Luis con aumentos interanuales del 40% y
39% respectivamente.
Por debajo de la inflación pero aún por arriba del promedio
se sitúan CABA y Salta al verificar incrementos del 37% cada una. Sin
sobrepasar la media se encuentran Chaco (35%), distritos grandes como Córdoba
(34%), Buenos Aires (33%) y Santa Fe (32%). Por su parte, en el extremo
inferior y muy alejadas del resto figuran San Juan y Tucumán en las que sus
recaudaciones propias sólo se incrementaron un 22% para el caso de la primera y
28% para la segunda.
El handicap recaudatorio con el que contaban las provincias
se ha esfumado y la pérdida de impulso en la generación de recursos propios
hace desaparecer una ventaja importante con la que contaron para mejorar sus
resultados fiscales durante 2013. Con trayectorias de crecimiento en los
recursos de origen nacional y provincial convergiendo entre sí, y su vez con la
senda del gasto, las provincias enfrentan un corsé más ajustado que el año
pasado y un menor margen de maniobra a la hora de equilibrar sus cuentas en lo
que resta de 2014.