La actividad de la construcción se derrumbó 75,6% en abril pasado reflejando una caída histórica en la medida interanual, a raíz del fuerte impacto por la parálisis producto de la pandemia Covid-19.
Los datos surgen de un relevamiento del Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), el cual también remarcó que solo en los primeros cuatro meses del año la actividad retrocedió 40,2%, respecto al mismo período de 2019. La baja respecto de marzo fue del 51,5%.
El informe también destaca la comercialización de insumos, que se vio afectada con una contracción del 30% como consecuencia del contundente freno de la actividad del sector, profundizada por el confinamiento desde hace ya más de 70 días.
Desde el sector temen que la profundización de la caída no encuentre un tope en el corto plazo y continúe la degradación de la actividad, afectando el desarrollo de la labor integral del sector y fundamentalmente los puestos de trabajo. Las estrictas medidas sanitarias paralizaron la actividad privada y en el último tiempo solo se registró la reapertura de algunas obras públicas.
