Allí, en presencia de docentes y directivos de nivel primario y secundario, se llevó a cabo una capacitación sobre Consumo Problemático en el marco del Programa Provincial Escuelas Saludables. Más tarde, con la presencia del ministro de Salud, Dr. Ramón Figueroa Castellanos, se entregaron diplomas y carteleras a escuelas que certificaron como “Amigables”
El objetivo del encuentro fue sensibilizar sobre el programa, al mismo tiempo que premiar a las escuelas que ya están adelantadas en las acciones conjuntas. Este trabajo se viene llevando a cabo desde hace menos de un año y ya están cubiertos casi todos los departamentos de la Provincia.
El Programa trata tres ejes específicos: alimentación saludable, educación sexual integral y consumo problemático. Busca, a través de estas actividades, lograr que los establecimientos certifiquen en una primera etapa como escuelas “amigables” para finalmente convertirse en “Saludables”. Para ello se debe cumplir con distintos requisitos para mejorar la calidad de vida de las personas.
Es importante destacar que este programa busca consolidar la mutua colaboración, entre Salud y Educación, en la protección integral del niño y adolescente en los tres ejes mencionados anteriormente.
Para Figueroa Castellanos “este Programa es muy representativo del camino que transitamos en Salud. Es un gran ejemplo de trabajo interinstitucional porque estamos ligados con Educación, con Obras Públicas, con Cultura, con distintas ONGs. Es, también un programa que se vuelca inmediatamente a la comunidad en esta relación inmediata con nuestros niños y adolescentes. Además trata tres temas que son fundamentales en sus vidas.”
En la charla con los presentes, el ministro los felicitó por su interés y relató distintas experiencias vividas con este Programa. Dijo que se lleva “muchas sorpresas, hay mucha gente comprometida. Los actores que se fueron involucrando son diferentes; en algunos lugares van los profesores, en otros, los preceptores o inspectores; así hemos formado un equipo de los dos ministerios (Educación y Salud) que es extraordinario. Pero necesitamos a los padres porque todos los esfuerzos que se hagan en 4 o 6 horas en las escuelas; cuando llegan a la casa, se caen porque no se trabajan en conjunto. Sobre todo en temas como adicciones. Ahora es el momento de involucrar a las familias, esa es nuestra meta más próxima porque la construcción debe ser colectiva.”
