Después de lograr sobrevivir 122 días sin contagios, hasta la llegada del primer caso el 3 de julio de 2020, y habiendo sido pionera en el uso de estrategias de prevención como la obligatoriedad del uso de barbijo, la provincia, que alcanzó entre enero y febrero de este año su pico más alto de contagios, realiza un balance entre flexibilizar y volver a la fase amarilla.
Con una cifra total de 8739 contagiados, Catamarca se para en una clara posición de ventaja respecto a sus vecinas provincias del NOA como La Rioja, por ejemplo, que cuenta con la cifra más cercana en un total de 10.317 contagios, para luego comenzar con cifras que duplican esta última, como el caso de Jujuy, con 20.888, Santiago del Estero, con 22.732 y Salta con 26.300. Al final de esta lista se encuentra Tucumán que, con una población de 1.694.656 personas, registra un total de 80.099 contagios
Así como es alentadora para la población catamarqueña la cifra de contagios respecto a la región, también lo es en cantidad de muertes a causa del virus, con una cifra de 55 personas fallecidas mientras provincias como Santiago del Estero cuentan con 269, o La Rioja 457, Jujuy 909, Salta 1101 y Tucumán 1.538 decesos. Sumando todo, el NOA tiene un total de 4.399 fallecimientos a causa del covid-19.
En una Argentina que cuenta ya con 2.118.616 contagios, 52.1192 fallecimientos y 1.911.338 personas recuperadas y que ha iniciado su proceso de vacunación, Catamarca ha hecho lo propio en este sentido y comenzará su segunda etapa de inmunización de la población.
