Desde la medianoche de este lunes, Nueva Zelanda estableció el cese de todas las medidas de confinamiento, excepto las restricciones en las fronteras, anunció su primera ministra Jacinda Ardern, convirtiéndose así en uno de los primeros países en dar este paso.
Las autoridades calificaron esta jornada como un "hito importante" tras confirmar la recuperación del último caso de covid-19 en el territorio. "Esto significa que ahora hay 0 casos activos en Nueva Zelanda. Gracias por quedarse en casa, evitar riesgos y por apoyar a los que luchan contra el virus", informó el Gobierno a través de Twitter.
En ese sentido, el Gobierno eliminó las restricciones al distanciamiento social, al pasar del nivel 2 al nivel 1 de alerta nacional, dijo Ardern en una conferencia de prensa.
Los eventos públicos y privados, los negocios de venta al por menor y la hostelería, así como todo el transporte público podrían reanudarse sin las medidas de distanciamiento social que todavía están en vigor en gran parte del mundo.
Sin embargo, continuaban los controles fronterizos para las personas que ingresan al país, lo que incluye exámenes de salud y el aislamiento obligatorio durante 14 días.
Today is a significant milestone as we announce that the last active case of COVID-19 in New Zealand has recovered.
“Aunque estamos en una posición más segura y fuerte, sigue sin haber un camino fácil de regreso a la vida anterior a la pandemia, pero la determinación y atención que hemos tenido en la respuesta a esta crisis sanitaria se verán ahora reflejadas en nuestra reconstrucción económica”, dijo Ardern.
Y agregó: "El trabajo no está acabado, no se puede negar que esto es un hito. Así que puedo terminar con un muy simple ‘Gracias, Nueva Zelanda’”.
En ese país no registraban casos activos desde que el virus llegó a finales de febrero, dijo el Ministerio de Salud. Nueva Zelanda alcanzó 1.154 infecciones y 22 muertes por la enfermedad.
“Confiamos en haber eliminado la transmisión del virus en Nueva Zelanda por ahora, pero la eliminación no es un punto en el tiempo, es un esfuerzo sostenido”, concluyó Ardern.