En la jornada de ayer martes, personal de la Comisaría de Fiambalá mediante un informe realizado desde el Destacamento Policial de Palo Blanco, toman conocimiento que en un paraje denominado “Loma Grande”, distante a más de 30 km al Oeste de esa localidad, se encontraba sin vida un hombre identificado como Julio Araya (47) el cual habría sido encontrado por familiares.
Inmediatamente, partió una comitiva conformada por personal policial y médico de turno, acompañados por vecinos y baqueanos. Una vez en el lugar, el facultativo determinó que la muerte fue por causas naturales, ya que el occiso habría tenido antecedentes de problemas cardíacos por lo tanto no hubo necesidad de realizar la operación de autopsia.
Posterior, a las pericias correspondientes y por orden de la Fiscalía de la 5° Circunscripción, con la colaboración de vecinos bajaron desde el cerro con el cuerpo en una angarilla, debiendo caminar por más de tres horas hasta llegar al lugar donde pueden acceder solamente vehículos 4X4 para luego trasladarlo hacia Palo Blanco.
Cerca de las 20 horas de este miércoles, por disposición de la justicia el cuerpo fue entregado a sus familiares para su posterior inhumación.
El extinto Julio Araya, como muchas personas más de la región, habitan en zonas cordilleranas de alta montaña, dedicados a la pequeña producción de caprinos, y en esta temporada, elaboran quesos y quesillos criollos para su comercialización lo cual genera el único ingreso económico para mantener a sus familias que dependen únicamente de ese trabajo durante todo el año.
Fuente: elabaucandigital.com
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