*A PARTIR DEL 18 DE OCTUBRE
Es un nuevo protocolo que se emplea en todas las unidades judiciales para receptar las denuncias por violencia de género. Es específico para esta problemática y contiene diversas categorías y puntos que son completados por el sumariante en la entrevista con la denunciante.
De esta manera, las denuncias por violencia de género quedan claramente identificadas y no se pierden en la nebulosa junto a denuncias por otros delitos.
En el formulario se especifican los datos filiatorios de la denunciante, del denunciado junto a datos socioeconómicos. También se consulta sobre antecedentes, se deja constancia expresa –en un casillero particular- de la documentación presentada y se le pregunta a la damnificada cuáles son las medidas que solicita, como por ejemplo exclusión del hogar del victimario, perimetral, guarda provisoria, entre otras.
Otra de las innovaciones que surgen en el nuevo protocolo es que están discriminadas los tipos de violencia: física, económica, psicológica, hostigamiento y otras. Esto representa un gran avance con respecto a la modalidad tradicional de recepción de denuncias de género, ya que las violencias económica y simbólica muchas veces no se receptaban y eran desestimadas por los mismos sumariantes o directamente no eran denunciadas por no saber cómo hacerlo.
Por otra parte, contribuye a que las denuncias por violencia de género contengan la mayor cantidad de información posible porque muchas de ellas no recibían tratamiento ante la falta de datos. También evita dejarlo en manos de la decisión arbitraria del sumariante que podía escribir solo lo que él consideraba importante y no todo lo que la denunciante expresara.
La aplicación el formulario es un gran paso en la lucha contra este flagelo, ahora resta ver cómo esto se traduce en la toma de decisiones efectivas por parte de fiscales y jueces, quienes son los encargados de impartir justicia y quienes, en definitiva, son los responsables de proteger a las víctimas y de que este tipo de delitos no queden en la nada perpetuando así una escalada de violencia que corroe a la sociedad.
