Radicales contra las “desenfrenadas ambiciones” de Brizuela y Castillo

Parece sentenciado el ocaso de los ex gobernadores Brizuela del Moral y Oscar Castillo, a quienes la Renovación Radical Popular (RRaP), como muchos radicales, señalan como responsables de la pérdida del poder en el 2011.
jueves, 13 de febrero de 2014 08:11
jueves, 13 de febrero de 2014 08:11

Según señaló el sector interno de la Unión Cívica Radical, el posible surgimiento de una nueva línea interna para enfrentar a los actuales popes de la UCR (Castillo-Brizuela del Moral) en eventuales elecciones, para dirimir cargos partidarios y electivos, es importante y auspicioso.

En un comunicado difundido por el sector, tanto Castillo como Brizuela del Moral son "los responsables de haber dilapidado el poder provincial, anteponiendo sus desenfrenadas ambiciones personales a los intereses generales, sin importarles haber hecho naufragar un proyecto político provincial como el Frente Cívico y Social (FCS), abarcativo, amplio, pluralista y cuyos orígenes se sustentó en valores, principios, ideas, planes y programas para el conjunto de todos los catamarqueños”.

En cuanto al nuevo espacio que surge en apoyo a la figura de Ricardo Guzmán, el sector señala que "la iniciativa, de ser confirmada oficialmente, no puede lógicamente pasar desapercibida, y por ende, desde ya la estaríamos calificando como un hecho auspicioso para la vida democrática de la UCR, lo cual naturalmente nos congratularía”.

Finalmente, entienden que quienes decidan enfrentar a los máximos popes "deberían diferenciarse de las prácticas y vicios perniciosos de la actual conducción, que tanto dañaron al radicalismo y, consecuentemente, al FCS”. Y piden que para lanzarse al ruedo y representar la alternativa de los "esquemas vetustos y amañados” es imprescindible hacerlo con determinación, "porque los amagues y doble discursos para forzar luego el convite al desgastado e involutivo sistema de la mesa chica y las negociaciones, pactos y acuerdos que luego no se cumplen, sería una maniobra muy burda y grotesca; y lo más cruel, una burla a los miles de radicales que sueñan con el cambio, la renovación y transformación del radicalismo catamarqueño”.

 

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