”Hemos comenzado el mes de junio, mes en el que podemos
encontrar fechas importantes de nuestra historia, como por ejemplo el 20 de junio,
Día de la Bandera, el 10 de junio Día de la Reafirmación de los derechos sobre
Malvinas. La muerte de nuestro General Felipe Varela, pero también este mes
tiene, a mi entender, dos hechos fundamentales que como hombre de la democracia
pretendo lo tengamos presentes para reflexionar lo qué fue la génesis de la
violencia política y el terrorismo de Estado en nuestro país”, planteó el
diputado provincial Guillermo Andrada.
"Para poner en contexto estas palabras es necesario tener en
cuenta que con la aparición del justicialismo en el gobierno en 1945, y
plasmado su espíritu y doctrina en la Constitución de 1949, se generaron
pilares fundamentales para el desarrollo de nuestro país en materia de igualdad
de derechos laborales y sociales, destacó.
"Este no fue un camino fácil, ya que instalar esta idea tocó
intereses de sectores acomodados y oligarquías dominantes, las cuales buscaron
denodadamente destruir estos logros. Es así, que motorizando una campaña de
desprestigio hostigaron a un gobierno democráticamente elegido por el pueblo y
en un hecho sin precedentes no trepidaron un 16 de junio de 1955 de bombardear
la Plaza de Mayo, Casa Rosada y edificio de la CGT con la muerte de más de 360
personas, despreciando la vida de civiles con la finalidad de acabar con un
gobierno que generaba derechos a los más necesitados”, recordó.
Es así que el diputado provincial remarcó que "este
movimiento sectario desembocó en la llamada revolución libertadora "Fusiladora”,
en un negro septiembre de 1955, proclamando presidente de facto primero a
Lonardi y luego al asesino Pedro Eugenio Aramburu”.
"Esta paradójica revolución libertadora comenzó con la génesis
de la violencia política cercenando derechos y buscó por todos los medios hacer
desaparecer del escenario político al peronismo dictando un 20 de noviembre de
1955, el famoso decreto 6141 que disolvía el partido peronista, prohibía
nuestra marcha, confisco sus locales. etc. También fue por más y avasalló
derechos laborales obtenidos entre los cuales por ejemplo se suspendió las
convenciones colectivas de trabajo”, agregó.
"Estas actitudes dictatoriales produjeron que se genere una resistencia
en el país de trabajadores, civiles y militares, que no estaban de acuerdo con
la dictadura originándose focos de protesta en distintos puntos del país”,
sostuvo.
En consonancia con estos movimientos, planteó que "una noche
del 9 de junio de 1956, comenzó un levantamiento militar liderado por el Gral.
de División Juan José Valle que intenta tomar la Escuela de Suboficiales de
Campo de Mayo, la Escuela de Mecánica del Ejército de Buenos Aires y el
Regimiento Nº 7 de Infantería de la Ciudad de La Plata, con un solo objetivo:
derrocar la dictadura del asesino Pedro Eugenio Aramburu y permitir el retorno
al país del General Juan Domingo Perón. Con tres claras exigencias, como
proclama: El cese inmediato de la persecución al partido peronista La
restitución de la Constitución de 1.949, y La liberación de todos los presos
políticos”.
"En las primeras horas del 10 de junio, el gobierno militar
de la Revolución Libertadora establece la Ley Marcial y da la orden de ejecutar
a los rebeldes capturados; en menos de 48 horas, civiles y militares son
fusilados en Lanús, La Plata, José León Suárez, Campo de Mayo, la Escuela de
Mecánica del Ejercito y la Penitenciaria Nacional. Para la noche del 11 de
junio de 1956, la lista de ejecutados asciende a 16 militares y 13 civiles”,
indicó.
"A fin de evitar más muertes, la madrugada del 12 de junio
de 1956, el Gral. Valle se entrega a las Autoridades Nacionales. Esa misma
noche, en el patio de la Penitenciaria Nacional, Valle es fusilado. El saldo
final fue más de treinta victimas fatales. Es así, que el 9 de junio de 1956 se
genera una de las jornadas más negras de la historia de nuestro país. Un grupo
de civiles fueron fusilados”, señaló.
"Hombres indefensos, sin acusación, sin juicio y sin
condena, en los basurales de León Suárez en forma clandestina. Un general de la
Nación y otros altos jefes militares fueron asesinados en la cárcel de Las
Heras. Nunca nadie se había atrevido a tanto”, marcó.
El General Perón dijo "La fuerza es el derecho de las
bestias. El peronismo se ha llenado de mártires y entre ellos no hay un solo
hombre que, como nuestros enemigos, pueda ser tildado de asesino con
fundamento, como podemos llamarlos a ellos con razón. La sangre generosa de
estos compañeros caídos por la infamia libertadora será siempre el pedestal de
Abel, que los seguirá hasta su tumba, llenándolos de remordimiento y de
vergüenza”.
En conclusión, Andrada dijo que "como hombres de la
democracia vinculado a la política, creo que es importante recordar estos
hechos en los cuales hay sangre derramada en defensa de la democracia y de los
derechos de los más necesitados y que la violencia generada como terrorismo de
estado es lo más cruel que como país podemos transitar”.
Lista de los muertos
por la Revolución Fusiladora:
Asesinados en Lanús, simulando fusilamiento 10 de Junio de
1956
Tte. Coronel José Albino Yrigoyen, Capitán Jorge Miguel
Costales, Dante Hipólito Lugo, Clemente Braulio Ros, Norberto Ros y Osvaldo
Alberto Albedro.
Asesinados en los basurales de José León Suárez, disparando
por la espalda 10 de junio de 1956
Carlos Lizaso, Nicolás Carranza, Francisco Garibotti, Vicente
Rodríguez y Mario Brión. Muertos por la represión en La Plata 10 de junio de
1956Carlos Irigoyen, Ramón R. Videla y Rolando Zanetta.
Fusilados en La Plata
11 y 12 de junio de 1956
Teniente Coronel Oscar Lorenzo Cogorno, Subteniente de
Reserva Alberto Abadie
Fusilados en Campo de
Mayo 11 de junio de 1956
Coronel Eduardo Alcibíades Cortines, Capitán Néstor Dardo
Cano, Coronel Ricardo Salomón Ibazeta, Capitán Eloy Luis Caro, Teniente Primero
Jorge Leopoldo Noriega y Teniente Primero Maestro de Banda de la Escuela de
Suboficial Néstor Marcelo Videla.
Asesinados en la Escuela de Mecánica del Ejercito 11 de
junio de 1956Sub Oficial Principal Ernesto Gareca; Sub Oficial Principal Miguel
Ángel Paolini; Cabo Músico José Miguel Rodríguez; Sargento Hugo Eladio Quiroga.
Ametrallado en el Automóvil Club Argentino 11 de junio de
1956 (falleció el 13 de junio de 1956 en el Hospital Fernández) Miguel Ángel
Maurino.
Fusilados en la
Penitenciaría Nacional de la Av. Las Heras 11 de junio de 1956
Sargento ayudante Isauro Costa Sargento carpintero Luis
Pugnetti y Sargento músico Luciano Isaías Rojas.
Fusilado en la
Penitenciaría Nacional de la Av. Las Heras 12 de junio de 1956 Gral. De
División Juan José Valle
Asesinado, simulando suicidio por ahorcamiento, en la
Divisional de Lanús, 28 de junio de 1956, donde estuvo detenido desde el 9 de
junio de 1956 Aldo Emil Jofré.