Las medidas de fuerza consisten en paro y movilización para el jueves 25 de febrero, a partir de las 10 horas, con convocatoria en la sede de Ayacucho y Prado. Para el viernes, habrá un paro total de actividades.
“Hacer respetar el derecho de los trabajadores”, apuntó el secretario general de ATE, Ricardo Arévalo, en medio de la conferencia de prensa donde se realizó el anuncio.
Cabe remarcar que los gremios nucleados en la FUSSI no están de acuerdo con el aumento salarial que ofrece el gobierno provincial del 32 por ciento. Lo que piden es un 50 por ciento para los empleados públicos provinciales, y un 60 por ciento para los municipales, teniendo en cuenta la inflación de los últimos tiempos.
Por otra parte, Arévalo cuestionó a los gremios “adeptos” apuntando a que “siguen actuando como interlocutores, gestores del Gobierno”.